“¿La Diputación está mal informada o miente descaradamente?”
1. Resumimos
aquí la descripción errónea o malintencionada que la Diputación de Castellón
publica en su web sobre la Torre de Capicorb:
Sábado,
5 de Enero de 2013 Bienes de interés cultural - Alcalà de Xivert –
Alcossebre. Arquitectura y Monumentos.
Torre de Cap i Corb Declarado Bien de Interés
Cultural. Torre vigía para la defensa de
los ataques de los piratas. La torre de Cap i Corb fue construida el 1427, …Es
de planta casi cuadrada (9 x 8,50 metros de lado) y tiene unos 12 metros de altura. Su
aspecto robusto viene reforzado por la fábrica de sillería en los cuatro
ángulos que conforman las paredes de cerramiento con un grosor de 2 metros cada una. Consta
de una planta baja en la que se abre la puerta original, con arco de piedra en
forma de medio punto; una planta media, con ventana sobre la vertical de la
puerta anterior, y una planta superior o cubierta en la que se conservan
todavía las ménsulas de la antigua corsera que tenia la torre (matacán
corrido). También posee unos dispositivos para uso de "ballestería de
trueno". Una escalera interior de caracol situada en el ángulo nordeste
del edificio, permite el acceso desde la planta baja a la media y a la azotea.
…El actual propietario realizó algunas obras de rehabilitación para convertirla
en habitable, consistiendo principalmente en adosarle a la pared posterior un
cuerpo rectangular de dos plantas, que alcanza los dos tercios de la altura
total del edificio. Interiormente se comunican dichas plantas con las
correspondientes de la torre. También se ha construido el acceso directo con la
planta media. Con estas edificaciones nuevas la torre ha perdido prácticamente
el antiguo porte de fortaleza medieval que tenia.
(C. Pérez-Olagüe) 2013 Patronato Provincial de Turismo de
Castellón. Diputación Provincial.
2. Y aquí está nuestra respuesta
con las debidas correcciones:
En
primer lugar, cabe destacar que la Diputación debería respetar la grafía de Capicorb, aprobada por la propia
Academia de la Lengua Valenciana.
En
segundo lugar, la restauración de la torre de Capicorb fue realizada por el
comprador de la época, el Sr. Dills,
que no sólo procedió a la restauración de una torre ya en evidente ruina hace
cuarenta años, sino que creó un ambiente y un espacio natural de extraordinaria
belleza, con unas pautas de conservacionismo delicadas y prudentes.
Conservó la torre en su totalidad y el añadido del
que ustedes con notable ligereza hacen mención en la parte posterior es de una
planta mínima (6 m2)
absolutamente indispensable para poder hacer habitable la torre, e integrado de
forma nada llamativa en el conjunto. La entrada delantera en la planta media de
la que nuevamente con manifiesta ligereza hacen ustedes mención, está hecha
adosando una simple escalera de piedra para poder acceder de forma natural a la
torre y se integra de forma casi indistinguible del propio torreón.
Estas
son las dos únicas obras realizadas en la misma torre que puedan afectar a la
obra misma, mínimamente y hechas con el mayor cuidado. Y sin aquella compra y estas obras, ahora no habría torre de la que
poder informar.
Por el contrario la diputación y el
ayuntamiento no han tenido ni el menor problema en permitir y aún facilitar la destrucción de buena parte de los edificios
históricos y monumentos del municipio, como es el caso del convento de
Alcalà, o en el mismo Capicorb la torre de aduanas, ni han mostrado jamás el
menor interés por Capicorb más que para cobrar impuestos y animar a los
promotores más destructivos a su urbanización masiva en detrimento de los
vecinos y propietarios tradicionales.
Sólo
la labor meritoria de vecinos y defensores del medio ambiente, el patrimonio
cultural y arquitectónico y por ende de la propiedad legítimamente adquirida,
ha permitido conservar un lugar excepcional como Capicorb, y
especialmente la punta de la desembocadura del río San Miguel, donde se ubica
la torre, como un paraje casi sin deteriorar.
Faltan a la verdad quienes publican
sin el menor rubor que el propietario que adquirió la torre de Capicorb hace ya
casi cuarenta años “conserva muy poco de
la estructura original” puesto que la evidencia es que no sólo conserva la totalidad de su estructura
original sino que gracias a haber
sido habitada de forma continuada y estable ha podido conservarse en perfecto
estado un monumento que se hubiera perdido totalmente ante la más absoluta indiferencia de la Diputación
y demás instituciones.
Faltan también de forma grosera a la verdad cuando ustedes
escriben y publican en su página oficial que “Con estas edificaciones nuevas la torre ha perdido prácticamente el
antiguo porte de fortaleza medieval que tenia”. Saben que mienten porque ustedes conocen que lo
que han hecho sus propietarios, con su
dinero personal y sin la más minima ayuda de ustedes, es
resaltar ese carácter de fortaleza medieval sin que por ello sufra la obra
primitiva de adosados de mal gusto o adherencias inadecuadas.
El
Sr. Dills
era un ciudadano norteamericano experto
precisamente en medio ambiente y protección del paisaje, con licenciatura
superior y demostrada experiencia en diversas obras en el Estado de
California, que casado con su esposa catalana, decidió retirarse a vivir entre
nosotros, lo que muchos vecinos apreciaron, aprecian y agradecen. La actual
propietaria, hija del Sr. Dills, mantiene la misma filosofía vital que heredó
de sus dignísimos padres, por lo que no resulta probable que ustedes estén
autorizados moralmente a publicar la sarta
de verdaderos insultos que vierten con ligereza tan notable en una página
oficial de la diputación.